DOG se siente solo en la gran ciudad de Nueva York. Así que un día decide que ROBOT será su amigo. Su amistad crecerá y crecerá pero...
Maravillosa está película de animación de Pablo Berger. Animación en la que los personajes no hablan, solo hay sonidos y expresiones. Y se dice tanto solo con eso.
La historia es emocionante de principio a fin. Nos habla de la soledad, la fragilidad, la amistad, el amor, las decisiones que uno va tomando en la vida y que acaban construyendo el camino por el que transitamos. A veces decisiones más acertadas, o menos, o quién sabe.
DOG y ROBOT siempre estarán en mi corazón.
Y maravillosa toda la música, muy importante al no tener diálogos y todos los detalles que nos trasladan al Nueva York de los 80. Además de los múltiples homenajes a las películas de los 80 y clásicos.
Una joya para disfrutar en pantalla grande.
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