Mi nombre es Natalia Logiudice, tengo 35 años y he estudiado Diseño de Indumentaria en la Universidad de Buenos aires y Patronaje industrial en Goymar Madrid.
Natalia nació en Buenos Aires, Argentina. Hace 8 años se vino a vivir a Madrid. Aquí conoció a Oscar, su marido, diseñador gráfico y segoviano. Ya va para 4 años que decidieron arrancar un proyecto para montar una tienda taller con la marca Tucha de ropa y complementos. Así que, en el 2005, montamos la tienda Tucha en el Barrio de Malasaña. Ha durado tres años y la famosa crisis nos ha hecho cerrar la tienda hace casi dos años.
Pero ellos han decidido seguir con la marca Tucha, no físicamente como tienda, sino por internet y en otros puntos de ventas que son en general tiendas de otros amigos: Madrid, Tenerife, Mallorca,... A pesar de la crisis puedo seguir diseñando mis productos y lo más importante haciendo lo que me gusta.
El nombre de Tucha viene del mote de Natalia en Argentina. A las chicas que se llaman Natalia les dicen Natucha y de ahí Tucha, es corto y fácil de recordar, aunque suene un poco egocéntrico.
Natalia, Tucha, siempre ha confeccionado ropa. Desde pequeña, a mis muñecas, y a los doce años mi madre me apunto a la academia de costura, donde todas mis compañeras eran abuelas de 70 a 80 años, pero me lo pasaba genial. Después del Cole a coser con 5 u 6 abuelas que me mimaban a más no poder.
Su vocación siguió su curso y se graduó en la universidad de Buenos Aires en la carrera de Diseño de Indumentaria. Y ya aquí en Madrid realizó un curso de Patronaje Industrial.
La inspiración para sus colecciones de complementos, siempre surge a partir de un elemento. Por ejemplo. Cerraron en Madrid un antigua mercería y tiraron botones antiguos, de los años 40, 50, 60,70, bueno un tesoro para mí. Hice unas flores con ellos que terminaron en colección de bolsos. O de pequeña me encantaban los clips de play mobil, pues pase por una tienda de antigüedades y tenían un montón, me los compre todos, de allí salió otra colección de bolsos, neceseres y bandoleras.
Y como estas, otras tantas anécdotas. Coger algo y reutilizarlo. La gente me pregunta que si estoy loca, que dónde voy por ahí juntando cosas que a pocos les llama la atención, y luego cuando ven los productos terminados, ¡no se lo creen!
La inspiración para las colecciones de ropa se la dan las telas. Es bastante difícil conseguir telas en Madrid, así que aprovecho los viajes para comprar todo lo que me gusta. Argentina, Barcelona, Francia. O telas antiguas, como las que venden en la tienda La revoltosa, en la Latina. O en almacenes de Aluche, Laguna, etc.
Como Natalia ha sido mamá recientemente de una niña pronto habrá ropa de niños en Tucha.
Hooola!
ResponderEliminarPues felicidades...haces cosas diferentes y son muy chulass!!
Besitos
Me ha encantado descubrir a esta nueva diseñadora! Aire fresco!!!
ResponderEliminarZepequeña.