Demeniñas

Me llamo Montse, tengo 31 años, vivo en Vigo desde hace algo más de un año y dedico todo mi tiempo libre a lo que más me gusta: diseñar y hacer complementos.

El inicio de Demeniñas se produjo hace muchos años, sin que Montse fuera consciente y aunque no tuviera todavía forma definitiva, ni nombre.

Todo viene por su madre, que es peluquera, y realizaba en casa tocados para novias, para comuniones o simplemente para el día a día de sus clientas. Cualquier momento libre lo dedicaba a crear, incluso a altas horas de la madrugada, y Montse la observaba coser y en alguna ocasión la ayudaba en pequeñas labores con sus cintas de raso, sus encajes, sus piedras,... Me encantaba ver todos esos materiales deslizándose entre sus delicados dedos. Sin duda creo que en esos pequeños momentos nació en mi mente Demeniñas sin yo saberlo. Es mi maestra, de eso no tengo duda.

Por motivos de estudios, y más tarde profesionales, Montse se mudó a Madrid donde vivió cinco años. Aquí encontró a gente que compartía su misma afición: la constante búsqueda de piedras, herramientas e hilos, moviéndonos de tienda en tienda por las callejuelas de la zona antigua de Madrid, para luego realizar con todos estos materiales complementos para uno mismo y para regalarnos entre nosotras.

Aprovechaban cualquier momento libre para quedar y mostrarse las últimas técnicas aprendidas, las últimas creaciones,..., y de paso tomarnos un café entre fornituras e hilos.

Después se marcho a Barcelona y junto con las miles de cajas de mudanza, arrastró también su hobby. Ya no podía dejar de crear, por lo que al poco de llegar a esta maravillosa ciudad ya me

conocían en todas las tiendas de piedras y abalorios.

Fue en Barcelona dónde decidió darle nombre al proyecto y comenzar a vender las piezas. Se me acumulaban los complementos en casa y tenía que darles salida para poder seguir creando.

Sus primeras “víctimas”, como Montse las llama, fueron sus compañeras de trabajo. Fue un momento muy gratificante ver que las colecciones les gustaban. En el fondo siempre mantuve la duda de si lo que hacía sólo me gustaría a mí, y esas primeras ventas me demostraron que no era así.

Al poco tiempo su madre se unió a la causa y comenzó a vender sus complementos entre sus clientas. Otra vez me sorprendía el buen acogimiento que tenían, lo que me permitió seguir comprando materiales y seguir creando.

Hace algo más de un año, Montse volvió a trasladarse, esta vez de vuelta a mi tierra, Galicia, (¡¡que bien!!), y de nuevo se mudaron conmigo todos mis botes de cristal y mis cajitas de abalorios.

Montse busca y rebusca mucho en tiendas y ferias para encontrar piedras que sean especiales, la parte que más me gusta es el trabajo con las flores secas que es lo que diferencia mis complementos de otros.

Todos contienen alguna flor seca que en algunos casos están sacadas de las macetas de su propia terraza y secadas con todo el amor. Creo que las flores dan un toque de sensibilidad y delicadeza a cada pieza.

Montse vive el día a día. Le encantaría poder decir que Demeniñas es su trabajo. De momento trabaja en una agencia de publicidad, trabajo que también le encanta, y Demeniñas es el hobby que la entretiene y le permite conocer gente nueva, viajar, ya que de vez en cuando me voy a Madrid o Barcelona a por materiales o a ferias de artesanía y que tantas satisfacciones le está proporcionando.

No tengo pretensiones, nos dice Montse, aunque si que es cierto que sería como un sueño poder vivir de esto.

Podemos encontrar a Demeniñas en tiendas:

• Nest Boutique (Madrid).
• A Cuadros (A Coruña)- próximamente.
• Showroom Mettro (también en su edición Lo + fashion5) en A Coruña.
• Alfar Artesanía (Vigo)
• Floristería Cedea (Barcelona).

y por supuesto en su blog.