Lola de Logaro

Mi nombre es Lola García Romaneli. Artesana/diseñadora de 38 años. Cántabra pero resido en Galicia, concretamente en Orense.

Logaro, son las iniciales de su nombre. Desde pequeña he firmado mis trabajos de plástica y del cole así. Fue una idea de mi padre cuando tenía 6 años, él me dijo que Logaro sonaba a nombre italiano, como mi segundo apellido, y que sería un nombre con el que la gente se quedaría. Y como por aquel entonces, lo que decía mi padre era sagrado para mí, era la visión de una niña de 5 años que idolatraba a su padre, no se puede pasar de él y no hacerle caso y desde entonces existe Logaro.

Logaro surge como una necesidad, mental, como persona inquieta y creativa que soy de poner nombre e identificar todo lo que hago. Logaro siempre ha existido, no es algo que haya surgido de repente. Lola lleva desde los 6 años haciendo cosillas que vendía en el cole. Con el tiempo estudió ingeniería y siguió vendiendo en la facultad.

Aunque ejerció de ingeniera unos años, nunca dejó de trabajar en Logaro. Hasta que hace 10 años obtuvo la carta artesanal en Retacería, patchwork, y fue como el pistoletazo necesario, el reconocimiento de mi actividad y desde entonces es un crear continuo que se transforma en accesorios complementos, ropa, etc, toda hecha por mí, no hago otra cosa.

El patchwork es mi pasión junto con el punto. Lo que ocurre con el patchwork es que es poco comercial por el tiempo de elaboración que implica, siempre que lo elabores de forma artesanal, claro está. Mis primeras ferias consistían en esto, pero después de varios descalabros me di cuenta de que tenía que disfrutar de telas, tejidos, tramas, texturas,…, y volver a mis orígenes con todos los conocimientos adquiridos durante todo este tiempo.


Por una parte los adquiridos desde su infancia con su madre, ella calcetaba, hacía punto, es una palabra muy gallega que me gusta mucho, para una empresa, con lo cual el tema de lanas e hilaturas le viene desde la cuna. Y por otra parte, con la formación adquirida del patchwork, a través de diversos profesores tanto nacionales como extranjeros, formación en diversas técnicas textiles, etc. A día de hoy, ha llegado a la horma de su zapato, donde mezclo todos los conocimientos adquiridos, la imaginación, lo que sigo aprendiendo, no sé,…, nunca veo el límite,…, y qué tristeza si lo viera, ¡la vida sería aburridísima!

Si hay un producto de Logaro que me encanta son las Manuelas. Dejo a Lola que nos cuente...

Surgen como un homenaje a mi pareja, la que durante todos estos años se mantiene a la sombra. Que ha hecho que tome decisiones, algunas acertadas, otras equivocadas, pero nunca podré decir que influenciada por nadie, con lo cual, en el fondo, ha hecho que me reforzase más en mí misma y creyese más en mi trabajo. Manuel se llama él, de ahí el nombre de Manuela.

Con la muñeca me simbolizo yo, mi espíritu alegre, con su sonrisa, mis trapitos y telitas de miles de colores con su vestido y ese gorrito de loquilla, que como en todo creativo no puede faltar ese puntito de demencia que nos hace tan diferentes. Cada día me alegro mas de haberla creado. Todas son diferentes y exclusivas, llevan su numerito en el vestido y cada persona que posee una sabe que es única.

Para poder seguir teniendo un poco cerca a sus Manuelas, Lola creo ¿Dónde está Manuela?

La idea del blog surgió de una buena amiga a raíz de mi viaje a Italia. Ella sabe que tengo mucho cariño a mis muñecas, que en ocasiones suelto la lagrimilla cuando se van y que las conozco a todas, incluso alguna tiene mote propio. Y me comentó si no me gustaría saber donde están algunas de ellas, que sería interesante proponer a las nuevas dueñas, dado el cariño que las tengo, que enviasen una foto con su Manuela en un lugar emblemático o si se la llevan de viaje, e ir colgándolas en su blog.

Me pareció una idea tan tierna que enseguida me puse manos a la obra con el blog y con el folleto que las acompaña. Hay muchas que no se dónde están, pero cada vez que recibo una foto es una alegría inmensa, difícil de explicar al resto de la gente, pero muy gratificante para mí. La gente que hace una foto se que valora mucho su Manuela y que no acabara en un cajón perdida.

Lola intenta hacer piezas que se puedan atesorar y heredar, no quiero que mi trabajo se abandone de una temporada a otra, no sigo ninguna tendencia ni moda, lo hago por impulsos creativos, los tejidos me indican más o menos lo que puedo hacer y una vez tengo los trapitos y las lanas ya veo la piezas. Son piezas que con el paso de los años crecen. Por ejemplo las bufandas de jirones, que son una seña identificativa de Logaro, mezclan sus dos actividades artesanales, retaceria y calceta y gancho, patchwork, y punto y ganchillo. Son piezas que están más bonitas cuanto más puestas estén. Tienen un corte especial que con el uso tiende a enroscarse haciendo tirabuzones, de algo me sirvió la carrera de ingeniería, se ríe Lola, y la gente que las compra un año, al siguiente cuando te ven, te la traen diciéndote que tenía razón, que ahora si están bonitas, que quieren otra y otra para un familiar, que no se la quita,..., es genial.

Seguro que os estáis preguntando dónde encontrar productos de Logaro, pues principalmente en ferias y on line. No tengo comercio físico. La gente que me conoce solicita cita y les muestro en mi taller.